Sonreír aunque no quieras

Optimismo, junto a una gran sonrisa es lo que hará que la gente de tu alrededor se sientan mejor consigo mismas y contigo, solo por el simple hecho de sonreírles y decirles que todo saldrá bien, por muy difícil o complicada que estén las cosas hoy en día. No puedes rendirte y dejar de sonreír, aunque el que realmente tenga el problema seas tú. Los problemas son de uno y deben quedarse con uno mismo, no preocupar a los demás ya que...tu misión es hacerles sonreír y no llorar o que frunzan el ceño. ¿Qué importa si no te va bien en el amor y te han dejado mil y una veces, o simplemente te han roto el corazón? Si dejas de sonreír y pareces una persona amargada, es cuando realmente nadie va a sentir la curiosidad de conocerte y ver lo que realmente eres; Una persona que sonríe a las duras y a las maduras.